DISPERSIONES

DISPERSIONES

viernes, 14 de enero de 2011


VIGILO MI PECHO VACÍO


Me despido de incertidumbres
claras y tibias de pregón calladas,
que no encuentro tras altas cumbres
parte de mi pecho arrebatado a dentelladas.

Vigilo mi cabaña vacía,
(soy tabla descompuesta en grietas)
sin que demore el viento también vigía,
su planear entre las aguas prietas.

No desenfundes mi corazón, ave lenta,
acaso salten pedazos de carne rotos;
fríos entre pastizales de albahaca y menta
anda mi lengua, entre amplios sotos.


Del poemario Las ratas de la conciencia, de Juanjo Cuenca.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario