DISPERSIONES

martes, 5 de marzo de 2013
EXTERTORES
La espuma se desvanece
entre siseos de blanca sal
(ocupa) en el sótano de piedra,
un claro distante.
Yace en esta doblegada suerte
un péndulo agasajado;
no escurre la tiniebla vaga
ni escuece el vástago.
La arena sopla mezquina
entre cordeles de luz propia.
El ave vuela baja,
simulando que anochece.
Sí, oro destaca entre arrozales:
de puro intento no te abrazo;
toca inmediato un laúd de penas
que macha y no se queja.
No se pierde demasiado pronto,
castizo, emulando un antojo,
pero se ve bajarse entre linos
y capas de acongojamiento.
Del poemario "Las ratas de la conciencia", de Juanjo Cuenca.-
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario